Andrés Santa Cruz, fundador y managing director de Kaikén, comercializadora en los mercados internacionales de este fruto seco, además de nueces y otras frutas frescas, estima que la fuerza que adquirió China en 2022 como importador de ciruelas deshidratadas chilenas se mantendrá en el presente periodo.
Ya se han disipado las dudas respecto a China, país que el año pasado tuvo un salto relevante, cuadruplicando los pedidos de 2021, pero que nadie podía asegurar que volvería a repetirse dado los vaivenes que ese mercado ha tenido los últimos años, sobre todo, por la pandemia. “Pero se ve que ahora lo de China es algo continuado en el tiempo”, dice.
En 2022, el gigante asiático fue el principal importador a nivel mundial de este superalimento, seguido de México y Reino Unido. Los envíos a ese país llegaron a 11.582 toneladas métricas (TM), equivalentes a US$ 36,5 millones. El total de exportaciones de ciruelas secas chilenas, durante 2022, fue de US$ 256 millones, equivalentes a 67.000 TM.
Puntualmente para Kaikén, “China será nuestro principal destino en volumen y facturación, considerando toda la variedad de nuestros productos, y estará en el top 3 en el caso puntual de ciruela deshidratada. También Europa es un mercado relevante para nosotros, principalmente Polonia, Alemania, Holanda y España”, indica el ejecutivo, ingeniero comercial de profesión y quien viene de una familia ligada al agro.
En cuanto a la demanda Santa Cruz comenta, “en general los mercados están bastante activos, con buena demanda, excepto Europa donde las decisiones de compra están más lentas. Se ven más temerosos por diversos factores, la inflación entre otros. En el otro extremo está China, muy activo y con ganas de seguir comprando”
Añade que en materia logística los mercados están absolutamente normalizados en todo ámbito, pero que “aún falta llegar a mejores precios en materia de tarifas navieras. Hay destinos donde hace un tiempo los precios ya están a niveles pre-pandemia, mientras otros donde aún ves tarifas que están a casi el doble. Sin embargo, han mejorado mucho respecto a los peak de precios que vimos en Europa de US$ 7.500 – US$ 8.000 por un contenedor de 20 pies.
Kaikén es una empresa creada por Andrés Santa Cruz, con más de una década de vida, que en 2021 renovó su imagen por un cambio en la visión del negocio que apunta a fortalecerse en el ámbito de la fruta fresca y seca (antes se llamaba Surnat, nombre que estaba muy relacionado conceptualmente con frutos secos).
La empresa no tiene plantaciones -es decir, no tiene campos propios-, pero sí trabaja con campos relacionados ubicados en Buin y el sur de Chile y con una red de productores asociados principalmente en la VI y VII regiones.
Exporta 1,5 millones de kilos solo de ciruela deshidratada, ubicándose entre las 15 principales firmas del área. “Para el 2025, esperamos ser un actor relevante en la industria, exportando entre fresco y deshidratado, el equivalente en seco a más de 5 millones de kilos”, añade Santa Cruz.
